La Dirección Integral de Supervisión y Control de La Habana, (DIS) ha desarrollado varias acciones para enfrentar precios especulativos y abusivos en establecimientos de Trabajadores por Cuenta Propia, Cooperativas No Agropecuarias (CNA) y Agropecuarias, Unidades del Comercio, la Gastronomía y algunas panaderías de la (EPIA), Unidad Básica de la Industria Alimentaria y las de la Cadena del Pan.
El director de la (DIS) en La Habana, Osvaldo Rivalta Torres, confirmó que como resultado de las acciones para contrarrestar las violaciones de la política de precios establecida para los productos agropecuarios se han realizado 14 mil 412 inspecciones de control, detectando 13 mil 481 violaciones, por ese concepto se han impuesto 16 mil 442 multas, amparadas en el Decreto 30 del 2021.
Como medidas accesorias se han efectuado ventas forzosas de las mercancías decomisadas, así como suspensión de Licencias de Trabajadores por Cuenta Propia.
Las principales tendencias han sido:
Venta de productos a precios superiores a los realmente aprobados.
Violaciones de normas al despachar los productos a la población afectando siempre al cliente.
Pizarras y tablillas informativas cuyos precios no están expuestos al público.
Venta de productos con precios especulativos y abusivos.
Retención de productos destinados a la comercialización minorista.
Las entidades estatales que más inciden en estás violaciones son:
– Mercados Agropecuarios
– Mercados Agropecuarios de Oferta y Demanda
– Punto de ventas de la Agricultura.
– UBIA (Unidad Básica de la Industría Alimentaria)
– Comercio y Gastronomía
– Cadenas de Tiendas Caribe y CIMEX.
– Los Trabajadores por Cuenta Propia (en particular los carretilleros y los expendedores de Alimentos en cafeterías).
La Resolución 271 del 29 de noviembre del 2021 del Gobernador de la capital confirma precios topados para los Mercados Estatales y las Plazas subordinadas a la entidad de Acopio a los siguientes productos agrícolas: el boniato, la yuca, el plátano fruta a 5 pesos y el plátano vianda 6 pesos, y en el caso del plátano burro a 4 pesos.
Asegura el funcionario que desde la entrada en vigor del Decreto 30 del 2021 se han impuesto 13 mil 290 multas por violaciones.
Entre las indisciplinas más frecuentes en Centros del Comercio y la Gastronomía, tanto Estatal como particular, están las pizarras informátivas desactualizadas, por no tener los precios oficiales. En el caso de las Panaderías de la (EPIA) Empresa Provincial de la Industria Alimentaria faltan las cartas técnicas por dónde se debe elaborar el pan.
Otra de las violaciones detectadas es la de retener mercancías en las tiendas, por esta causa se impusieron 856 multas. También han sido sancionados administrativos por no aplicar las medidas disciplinarias a los infractores.
Las acciones de inspecciones han conllevado a la imposición de multas, el decomiso de las mercancías, ventas forzosas en mil 361 ocasiones y se han suspendido 126 Licencias a los Trabajadores por Cuenta Propia y Formas Productivas. Una de las deficiencias detectadas con mayor frecuencia son la venta de alimentos sin la debida autorización, puntos de ventas de productores agropecuarios improvisados.
928 Mercados Agropecuarios han sido visitados en La Habana, detectándose violaciones en 840.
Los cuerpos de inspección han impuesto mil 800 multas en mercados tanto a los administrativos, como concurrentes. Igualmente 688 panaderías han recibido inspecciones, aplicándose mil 512 multas, dentro de las violaciones identificada está el bajo peso en el gramaje de los panes, así mismo se han detectado problemas en panaderías perteneciente a la Cadena del Pan.
Las Tiendas gestionadas por las Cadenas de Caracol, TRD, y Panamericanas en ofertas en MLC también han presentado dificultades, como retenciones de mercancías, precios no visibles al público y favoritismo a determinadas personas.
El control de los precios es tarea de todos, sabemos que hay déficit de productos, precios especulativos, abusivos y escasez; sin embargo, debemos llamar a la solidaridad, al amor entre nosotros mismos.
Resulta necesario dialogar con los productores y quienes trasladan dichos productos agropecuarios, que en su mayoría lo encarecen más que los propios campesinos, otro elemento esencial es que cada vendedor ofrezca el verdadero gramaje, según el precio y calidad.
En tiempos como estos, de déficit de ofertas, hay que implementar mecanismos de control y distribución más equitativos. El control no solo debe ser institucional, sino popular. Tomado de Radio Rebelde.
