Los elevados precios, ese fenómeno que acelera los pulsos y atormenta en un momento de reordenamientos progresivos, pero en el que no puede postergarse el alimento de cada día y el acceso a bienes de primera necesidad, han acaparado la atención en las últimas dos semanas, en el programa del mediodía de la televisora territorial Crisol de la Nacionalidad Cubana.
La voluntad no solo de atender, sino buscar respuestas ante el colectivo reclamo popular de transformar ese asunto, fue llevada al espacio por las máximas autoridades de la provincia, y organismos que deciden en la solución del problema.
Un primer programa en torno al tema, la pasada semana, inició con el enunciamiento de algunas de las tantas opiniones del pueblo al respecto: ¿por qué cada día suben más los precios de la gastronomía?; ¿por qué no se baja el del plátano burro si hay existencia en las placitas y los mercados agropecuarios, y ¿por qué con cuatro días en las canchas sigue el producto con el mismo precio?; ¿por qué el Estado vende tan caros los zapatos en las tiendas de productos industriales? …
Engrosaron la lista, inquietudes sobre el precio del bocadito con puerco asado, el de los productos de las fábricas de conserva, el de la botella de manteca en Campechuela, el de una cerveza en los paladares, de la carne de puerco, del pasaje de una máquina hacia a Holguín, de un pequeño paquete con 13 galletas, y otras tantas que, de acuerdo con Manuel Maceo Martí, miembro del Buró Provincial del Partido en Granma, llegan hasta los equipos de opinión del pueblo.
COSAS Y CASOS
Para Daniel Silveira, coordinador de programas y objetivos en el Gobierno provincial, encontrar una respuesta, precisa primero transformar la manera en que pensamos este asunto, porque aunque ciertamente hay un grupo de medidas en implementación, nuevos actores económicos, facultades, muchas cadenas de suministros han desaparecido y aparecen otras más caras, ha faltado a los organismos involucrados, analizar el asunto con mayor rigor, establecer prioridades.
Reconoció productos con precios más allá de lo que realmente les cuesta elaborarlos, a pesar de las carencias de insumos, y como una de las principales causas del desnivel de los precios, la larga cadena de comercialización, en la que intervienen en ocasiones hasta 12 intermediarios.
Llamó la atención en torno a la necesidad de fortalecer el trabajo de los organismos fiscalizadores, y de que las administraciones jueguen el papel que les corresponden, pues no se le puede permitir al que lleva el producto al mercado que le ponga el precio que quiere y entiende, hay que echar más números, para llegar a consensos con los suministradores, precisó.
Juan Carlos Berenguer, director provincial de finanzas y precios, explicó que, si una de las nuevas medidas es precisamente la descentralización de la formación de los precios, con nuevas facultades para las entidades y unidades básicas, la política vigente en la formación de estos sigue contemplando ineludiblemente, gastos, costos, aportes al presupuesto y otras obligaciones. Toca a su organismo la responsabilidad de fiscalizar, revisar, orientar, de conjunto con la Dirección de Inspección, para que se observen y cumplan esos principios.
A propósito, Héctor Cordero Hernández, director de este último organismo relacionó incidencias detectadas en las últimas inspecciones realizadas en los municipios granmenses, y entre las cuales persisten venta de medicamentos sin receta médica y suministro a determinadas farmacias, de cantidades de medicamentos superiores a las que le corresponden, ambas irregularidades reconocidas como causas y condiciones para la posterior venta ilegal y a precios desorbitantes.
Fueron detectados productos con precios no visibles, unidades con productos retenidos o guardados, faltantes en unidades del comercio en moneda nacional como en las tiendas recaudadoras de divisa, no relación entre calidad y precio, precios por encima de los establecidos y otros que en honor a la verdad no son nuevos, sino añejos y que comparten las localidades inspeccionadas.
José Fontanals Remón, director del Grupo Empresarial de Comercio, al intervenir en esos espacios, reconoció que en realidad el tema precios es muy complicado y que, en el camino de encontrar una solución, la principal tarea por el momento es no permitir que sigan aumentando.
Salió a relucir el llevado, traído y vilipendiado asunto de la carne de cerdo, cuyo precio, dijo, subió en el último mes todos los días y hoy se paga a 150 ese producto que tiene como fuente de abastecimiento en general a productores independientes, y a los que habrá obligadamente que llamar a capítulo.
Bajar los precios del sector -hacia ahí apunto el debate- debe conducir, entre otras variantes, a ir al productor, a negociar con este, porque se ha implantado en las unidades el servirse de los trabajadores por cuenta propia.
MUROS DE CONTENCIÓN
El coordinador Daniel Silveira, aseguró que entre las tareas inmediatas planteadas en el territorio, está examinar los precios de los proveedores principales, y también realizar análisis de los precios de productos del sector no estatal, incluidos los nuevos actores económicos, porque la descentralización de facultades hay que ejercerla correctamente, y ha sido una tendencia, el convertirnos en revendedores de lo que hace otro, criticó.
En ese punto coincidió la vicegobernadora granmense Yanetsy Terry Gutiérrez, quien habló de las interpretaciones incorrectas en torno a las facultades que se descentralizan. “La facultad que se otorga es la de formar un precio, que no puede responder a que usted se hace una idea de lo que la población puede pagarle, hay que hacer valer las políticas que rigen la formación de los precios, pues en ningún momento el nuevo modelo económico se ha propuesto una afectación a la población.
“No puede decirse, agregó, que va a haber una transformación de la noche a la mañana, pero el precio minorista no puede cargar con ineficiencias del sector empresarial, y la población no puede cansarse de exigir ese respeto, ni resignarnos ante violaciones.”
Federico Hernández Hernández, miembro del Comité Central del Partido y su primer secretario en Granma, recordó que el proceso de ordenamiento previó un incremento de los precios, pero no desmedidos, desorbitantes como los estamos viviendo hoy.
“Lo primero que tenemos que saber es que el principal problema de la economía nuestra es de producción, necesitamos que se produzca más y con mayor calidad, pues lo que se produce no alcanza.
“Es necesario que los precios entren en un escenario de oferta- demanda, porque la vía para que el precio baje y se estabilice es la permanencia de un producto, y eso no lo hemos logrado por varias razones; las 63 medidas aprobadas por el país buscar precisamente estimular la producción de alimentos.
“Las políticas establecidas descentralizan facultades, pero no la responsabilidad de las instituciones de conducir este proceso de los precios”, agregó.
Corroboró la pertinencia de hacer de inmediato un análisis y revisión de precios, suministrador a suministrador, productor a productor, porque aunque las fichas de costo dan un costo más alto que anteriormente, el precio final no puede ser desorbitante
“Lo que está sucediendo hoy en el caso de los productores agropecuarios, ejemplificó, es que aunque se aplique la ficha de costo a cualquier producto, el margen comercial para que tenga una ganancia acorde a su gestión y además se desarrolle, cuando ese precio llega a la placita o al mercado, lo hace con un nivel de intermediarios que hacen el precio exorbitante. Entonces no tiene nada que ver lo que le toca al pueblo con lo que está llegando al mercado, incluso a veces el intermediario gana más que el que produce.”
Se refirió el dirigente partidista a la gestión de los comités de precios y contratación, y reiteró la importancia de contratarlo todo, llegarle a cada productor.
Llamó a profundizar también en la relación precio- calidad, y lograrlo incluso en la gastronomía “Acopio, ejemplificó, no es eficiente en eso, hay falta de gestión y tiene que resolverlo; por otra parte está el que viola porque viola, y estamos hablando de unidades estatales, de gente insensible, precisó.
“Un cambio de estructura no puede implicar cambios de precios, si la cuestión es elevar el salario hay que buscar qué cosas más hacer para elevar ese ingreso, pero no puede ser que un producto que suministra el estado y no llega por la resolución 99 (autogestión), eleve su precio cuatro o cinco veces por encima.
“Hay que lograr un análisis centro a centro de los que expenden alimentos a la población, hay muchas reservas., y tendremos que seguir discutiendo este tema en otros programas, dende se exponga qué se está haciendo desde las estructuras del Gobierno en el municipio
“Estas son las indicaciones del Primer secretario Miguel Diaz-Canel, y eso es parte de la continuidad del congreso del Partido, y es defender la revolución, porque defender al pueblo es defender al socialismo. Hay que seguir escuchando las opiniones de la población, porque está demostrado que hasta hoy lo establecido en cuanto a oferta y demanda no se ha hecho, ha faltado organización, control institucional, mayor exigencia del gobierno en los territorios, y se nota en algunos lugares falta de responsabilidad, demora, inmovilismo, inercia, y también falta de compromiso y de respeto al pueblo”, concluyó.